coloniales, de los cuales depende hasta el 25% de las especies marinas, incluyendo las tortugas, se encuentran entre los ecosistemas tropicales más altos de biodiversidad, estos tienen un esqueleto que va creciendo con el tiempo, llamado la roca coralina y crecen pegados al fondo, es decir que no se pueden mover, son importantes porque son los que ayudan a disipar las tormentas y fuerte oleajes para evitar la erosión de las playas. El crecimiento lento de los pólipos y la expansión de las estructuras esqueléticas duras conforman la estructura permanente de los arrecifes de coral con el transcurso del tiempo. Los pólipos de los corales que forman arrecifes contienen algas microscópicas llamadas zooxantelas, que mantienen una relación simbiótica con estos animales. Los pólipos corales (animales) proporcionan un hábitat para las algas (plantas) y, en intercambio, las algas les proveen a los pólipos el alimento que generan a través de la fotosíntesis.
Hoy en día los arrecifes de corales están siendo
afectados por el calentamiento global, así también por la acción de la mano del
hombre, por lo que muchos corales están muriendo. Es mucho lo que está en
juego, además de su riqueza natural y las espe
cies que dependen de ellos para
sobrevivir, los corales nos proveen seguridad alimentaria a través de la pesca,
nos protegen de inundación y hasta son la materia prima de algunos medicamentos
para combatir el cáncer. Son realmente súper ecosistemas, los llamamos las
células tropicales del mar, porque son tan ricas en biodiversidad y son muy
valiosas pero no los estamos tratando con cuidado
Es por esto que muchas fundaciones están tratando de
crear conciencia y educar a las persona del papel importante que juegan estos
seres vivo en los ecosistemas, así como para los seres humanos.